La Pandemia por el COVID 19, llegó para quedarse como ha pasado con muchas enfermedades en la historia de la humanidad, como fue la Viruela; un virus que lleva afectando a la humanidad desde hace 10.000 años. Su nombre hace referencia a las pústulas que aparecían en la piel de quien la sufría. Era una enfermedad grave y extremadamente contagiosa que llegó a tener tasa de mortalidad de hasta el 30%; el Sarampión, se estima que esta enfermedad acabó con la vida de 200 millones de personas antes de que se encontrase una vacuna; y no menos importante el VIH, a pesar de que pueda parecer una enfermedad diferente a las anteriores, el virus de la inmunodeficiencia humana tiene una tasa de mortalidad del 80% si no se trata a tiempo; así como otras enfermedades más que podemos señalar.
Está Pandemia denominada Covid-19, a muchos países nos tiene en el confinamiento, con extenuantes medidas de distanciamiento social, que nos permite reflexionar sobre los profundos cambios en la dinámica de las sociedades del futuro, como también es cierto que habrá cambios y transformaciones radicales en la forma de hacer política; en las campañas electorales y por su puesto en las ya próximas elecciones del próximo año en el que habrá de elegirse gobernadores, diputados y presidentes municipales en México. No será nada fácil, si el común denominador siga siendo el distanciamiento social; a reserva que antes se encuentre la cura.
Las redes sociales virtuales serán el escenario por excelencia de la atracción electoral. Implicará más énfasis en el plano de los mensajes políticos, pero también mayor difusión de “Fake News”. Los candidatos y partidos políticos tendrán que jugar con elementos de persuasión virtual, pero también deberán implementar nuevas formas de acercarse a la ciudadanía, con exactos protocolos sanitarios originados por la ya citada pandemia.
Cabe destacar que se prevé que esta Pandemia, provoque un incremento de la pobreza, la desigualdad, la inseguridad; como no sucedía en años, quizá en décadas; y si la enfermedad sigue, habrá confinamiento y distanciamiento social; situación que no hará fácil las campañas políticas, y en algunos casos partidos y candidatos estarán en desventaja en comparación a otros candidatos que se encuentren en puestos oficiales o en la vitrina política.
La tarea “No” será nada fácil, por mucho que se mencione que durante este año llegaremos a los picos del contagio, o que se asegure que ya para el próximo año, tendremos una vacuna y que estaremos ya en la normalidad, desde mi punto de vista es difícil pensar en ello, de un modo u otro, la pandemia provocada por el SARS-Cov-2, condicionara la ejecución de los procesos electorales. Algunos Estados de la República tendrán elecciones el año próximo; y todos los que deseen aspirar a un puesto de elección popular, deberán de buscar electoralmente estrategias y soluciones diferentes a las ya tradicionales, y con ello ganar la simpatía del electorado y su voto.
En Jalisco habrá elecciones y con el regreso a la nueva normalidad, será inevitable cambiar estilos de vida, pero insisto que esto alcanzará a los comicios del siguiente año, que obligan a que las instituciones correspondientes ya deben de ir previendo y tomar acciones inmediatas para ese próximo evento y con ello proteger la salud de la ciudadanía, porque la pandemia por COVID-19, es algo que podría extenderse de manera indefinida.
Para hacer esto posible, se comienza a visualizar la posibilidad de impulsar una reforma constitucional y al mismo Código Electoral de Jalisco, donde sería que las precampañas arranquen en el mes de abril, sólo por 20 días; de tal forma que las campañas se desarrollen únicamente por 30 días en el mes de mayo, y tener el margen de 07 días, que sería el primer domingo del mes de junio del año 2021. De ser así el tiempo corre, es necesario que el Pleno del Congreso de Jalisco haga modificaciones y apruebe todas las reformas posibles en materia electoral, a más tardar el 24 de junio.
Por último y recapitulando, considero que la mayoría de los candidatos y partidos se enfocarán en herramientas a distancia, ya sea videoconferencias, reuniones telefónicas, publicidad en medios sociales y tradicionales, mensajes por las redes sociales, correos electrónicos; todo con la esperanza de que las campañas logren llegar al máximo electorado posible; además es importante mencionar que aún con las medidas de distanciamiento y aislamiento social; los sectores más “vulnerables”, seguirán siendo la carne de cañón de partidos y candidatos, ya que seguramente con el paso de esta pandemia dejará más pobreza y mayor desolación, por lo tanto, mayor será el control político de maquinarias clientelares y de poderes ilegales. Lamentablemente, esto último quizás no cambie.
Pero este tema no termina aquí, se hace necesario concluir en TIEMPOS DE PANDEMIA con las preguntas siguientes:
¿Cómo realizar campañas efectivas para que la ciudadanía conozca a los posibles candidatos y de que partidos son; o si son independientes?
¿Cuales serán las estrategias para realizar sus campañas tanto partidos políticos como candidatos?
¿Cuál será las funciones del Instituto Electoral de llegar a las ELECCIONES EN TEMPOS DE PANDEMIA?
¡¡¡¡Que hacer contra esto!!!!