Julio César Hernández
En una sesión en la que se esperaba que salieran “chispas” y que finalmente no ocurrió, los consejeros del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) aprobaron por unanimidad los dictámenes que aprobaron el registro de la agrupación Hagamos Jalisco y de la asociación Futuro Jalisco como nuevos partidos políticos estatales.
De todos es sabido que Hagamos Jalisco es prácticamente el partido político del Grupo Universidad, que comanda el ex rector Raúl Padilla López, quien además mantiene hasta el momento el control del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el estado; en tanto que Futuro Jalisco fue conformado por los inquietos jóvenes de la agrupación Wikipolítica, comandados por el ex independiente Pedro Kumamoto Aguilar.
Ambos partidos, de acuerdo a la ley electoral, no podrán hacer alianza con ningún otro por ser, en el 2021, la primera ocasión que participarán en una elección, y deberán “jugar” solos para poder refrendar su registro. De lograrlo, en el 2024, entonces sí, podrán ir en alianza con quien quieran, pero primero tendrán que alcanzar el porcentaje de ley el próximo año para mantener su registro.
¿Podrán dos partidos políticos estatales menguar la fuerza de los partidos tradicionales de carácter nacional y que ostentan el poder federal, como Morena, y el estatal, como Movimiento Ciudadano? ¿Lograrán arrebatarles espacios a partidos con mayor experiencia y estructura, aunque en algunas partes debilitadas, como el PAN o el mismo PRD?
¿Qué perfil de candidatos les propondrán a los electores como para apostar que serán capaces de triunfar sobre cuadros ya hechos de los partidos tradicionales? ¿Qué plataforma, qué doctrina, qué principios, serán su bandera como para ganarse la confianza del electorado? ¿A qué le apostarán para posicionarse por encima de quienes tendrán más dinero para la cobertura de sus campañas?
En el caso de Hagamos, ¿veremos como candidatos a quienes alguna vez ya estuvieron en la boleta electoral, pero bajos las siglas del PRD? ¿Serán los mismos que ya contendieron y no ganaron su elección o que si llegaron a ocupar un cargo de elección popular fue porque llegaron como candidatos plurinominales, en el caso de los legisladores?
Hoy los integrantes de Hagamos y Futuro, así como sus promotores, tiene algo que festejar: el registro logrado. Pero desde ya deberán de ponerse a trabajar para llegar a ser verdaderamente una opción electoral, porque de otra forma la elección del 2021 se convertirá en su debut y despedida. Y para volver a regresar será todavía más difícil.
Lo que sí no debemos de esperar es que estos nuevos partidos sean diferentes a los ya existentes, porque antes que nada se rigen por el mismo sistema, deberán de tener la misma estructura -el modelo es lo diferente- y tendrán el mismo objetivo: llegar al poder. Y las herramientas para lograrlo, también son las mismas.
Así, pues, bienvenidos estos dos nuevos partidos, pero no hay que hacerse muchas ilusiones, porque así como ayer los denominados “independientes” (hoy en Futuro) decepcionaron a muchos de sus seguidores, hoy puede suceder lo mismo al actuar como partido político sin margen alguno para hacer política diferente más el que les deje su propia creatividad.
