Gabriela Godínez García
Roberto Cantoral fue un personaje que ha marcado la vida de muchas personas, a través de sus melodías, las cuales a lo largo de décadas han sido interpretadas por diversos cantantes, es por ello que su hijo Roberto Cantoral Zucchi, decidió dar a conocer un poco de la vida vida de su padre para que lo conocieran y marque las horas de sus vidas.
A raíz de la muerte de su padre, decidieron todos los hermano poner en orden todos los documentos que tenía, las partituras, las canciones, así como algunas de las fotografías que pudieran tener fotografías que podíamos tener a raíz del fallecimiento de mi padre, ya que le querían realizar homenajes o pláticas sobre la obra de Roberto Cantoral sin embargo no se tenía la información necesaria.
Por dicha razón, dijo, acudieron a la casa de su padre y empezaron a descubrir muchas muchas cosas de su vida, las cuales empezó a escribir en una pequeña semblanza, empezando a redactar de tal manera que recordaba anécdotas que en su momento le platicó, lo cual lo motivó a escribir el libro titulado detén el tiempo en tus manos.
El autor añadió que el libro está relatado de una manera novelada y anecdótica, para hacerlo lo más real posible, donde relató los acontecimientos más relevantes de la vida de Cantoral, donde habló de todas sus virtudes y defectos, en un relato en tercera persona con el objetivo de no caer en sentimentalismo, con el respeto que se merece.
Cantoral Zucchi, sí recordó que el capítulo más difícil para escribir fue el distanciamiento entre su padre y su madre, relatando muchas de las anécdotas y el cómo surgieron algunas de sus canciones, donde los lectores descubrirán nuevas canciones que él escribía con las vivencias de otras parejas, que le servía de inspiración y se convertía en un regalo para las mismas.
El autor de la biografía señaló que la mayoría de las canciones que escribió fueron grabadas, sin embargo muchas no fueron difundidas de la misma manera en que se dio promoción a canciones como La Barca, el reloj, Regálame esta noche, entre otras.
Como hijo indicó que fue muy difícil la muerte de su padre, al haber sido de manera inesperada, iniciando con una pequeña gripa que se le complicó con una neumonía y al trasladarlo a México le da un paro respiratorio y fue ahí donde se detuvo el tiempo para el gran Roberto Cantoral.
«Hizo todo lo que él quiso, tenía un carácter muy fuerte impositivo, que yo creo que pocos hombres han vivido lo que vivió mi padre», habiendo sido muy estricto con todos sus hijos y les hacía respetar a todas las personas sin importar su condición social y a prepararse para ser mejores personas para llegar a donde deseen.
Agregó que la unión familiar fue esencial en su vida y recuerda con mucho cariño las tardes de sobremesa que compartió con él, en lo que respecta a su trabajo en la sociedad de autores, indicó que su padre poco tiempo antes de morir decidió dejar la presidencia de la misma, dejando en su lugar al también compositor Armando Manzanero y y que fuera Martín Urieta el vicepresidente, quien actualmente dirige la sociedad de autores.
Por último comentó que existe la posibilidad de realizar una serie como homenaje a la vida y trayectoria de su padre